Les comparto un fragmento de la escritura lúcida, profunda, con un soplo de urgencia, de la poeta y ensayista uruguaya Idea Vilariño. Su poesía está recogida por Lumen en un bello libro que debe leerse y releerse:
Una lluvia pausada, alargada, serena,
envolvente, inquietante, sostenida, perfecta.
He dejado la música, ahogué todas las voces
para escuchar la suya que suena tenazmente
como un hilo de plata dentro de un viejo odre.
Y me digo, rendida, sin voz, pausadamente,
que la lluvia cayendo hace un ruido de gente
cayendo sobre el mundo a lo ancho de los siglos
acompasadamente.
Dentro de mí no hay ruidos.
Hay cántaros vacíos, campanarios en ruinas,
hogueras apagadas, hay agotadas minas
blancos ojos de estatua, grandes estrellas huecas,
relojes sin agujas y libros sin palabras
y violines sin cuerdas.
Y un silencio espantoso en que cae la música
armoniosa, cansada, perfecta, de la lluvia
con un ruido de perlas contra el fondo de un cofre,
con un ruido de alas, de dedos; con un ruido
monótono, angustioso, ancestral, monocorde.
***
Noche de sábado
Todo el aire
los cielos
el vasto mundo ebrio
dan vueltas y más vueltas y más
alrededor de este cuarto esta cama
esta luz esta hoja.
Toda la vida
toda
vibra frágil y densa
o brilla por ahí
o se rompe en lo oscuro.
Toda la vida vive
toda la noche es noche
el mundo mundo
todos
están afuera están
fuera de aquí
de mi ámbito
para todos es sábado
es la noche del sábado
y yo estoy sola sola
y estoy sola
y soy sola
aunque a veces
a veces
me invade a veces una
nostalgia de la vida.
***
Esto
Esto que va que viene
que llevamos traemos
de un lado a otro
huesitos ganglios médulas
la voz el tacto dulce
el cristalino
el pubis
esto que cada noche
guardamos
frágil cosa
todo esto
qué es esto
sangre
aliento
piel
nada.
***
La piel
Tu contacto
tu piel
suave fuerte tendida
dando dicha
apegada
al amor a lo tibio
pálida por la frente
sobre los huesos fina
triste en las sienes
fuerte en las piernas
blanda en las mejillas
y vibrante
caliente
llena de fuegos
viva
con una vida ávida de traspasarse
tierna
rendidamente íntima.
Así era tu piel
lo que tomé
que diste.
***
Playa Girón
Siempre habrá alguna bota sobre el sueño
efímero del hombre
una bota de fuerza y sin razón
pronta a golpear
dispuesta a ensangrentarse.
Cada vez que los hombres se incorporan
cada vez que reclaman lo que es suyo
o que buscan ser hombres solamente
cada vez que la hora de la verdad la hora
de la justicia suenan
la bota rompe ensucia aplasta
deshace la esperanza la ilusión
de simple dicha humana para todos
porque tiene otros fines como Dios
como dicen los curas que su dios
tiene otros altos fines misteriosos
otros planes en que entran Hiroshima
España Argelia Hungría y todo el resto
en que entran la injusticia la opresión
el abandono el hambre el frío el miedo
la explotación la muerte
todo el horror todo el dolor del hombre.
Va cambiando de pies según el oro
según la fuerza y el poder se mudan
pero siempre habrá alguna
a veces más de una
pisoteando los sueños de los hombres.
***
Como el que desvelado
a eso de las cuatro
mira con ojos tristes
a su amante que duerme
descifrando la vieja eterna estafa.